miércoles, 10 de junio de 2020

Neuroeducación, experencia motivadora para el alumnado con clases a distancia

Durante la época del confinamiento originada por la situación de pandemia que ha irrumpido en nuestras vidas de manera inesperada, muchos somos los y las docentes que hemos tenido que adaptar de la noche a la mañana nuestras clases de manera on-line y además incorporar elementos dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje que mantuvieran motivado al alumnado durante la realización de las clases a distancia.

Por ello, en 1º curso del ciclo formativo de grado superior de integración social, en el módulo de Metodología de la Intervención social, se ha apostado durante este periodo por los avances que nos ofrece el terreno de la neurociencia, que nos aporta una valiosa información sobre cómo funciona el cerebro y utilizarlo para mejorar y potenciar el proceso de enseñanza-aprendizaje en nuestra práctica diaria como docentes a distancia.

A continuación explicaré en cuatro pasos, los aspectos que pueden ayudarnos en nuestra tarea como docentes.

1.- Acercarnos a la realidad e intereses del alumnado: Parece algo lógico y se nos insiste muchas veces a la hora de planificar nuestras sesiones, pero no es algo fácil de lograr. En este sentido debemos aprovechar aquello que le interese al alumnado e incluirlo en el proceso de aprendizaje con el objetivo de que se sientan identificados con ello y además se emocionen. 
Para ello, se me ocurrió que aprendieran a utilizar la herramienta Genially, presentándome a su familia, aquella con la que actualmente están pasando la pandemia. De esta manera se emocionaron, me emocionaron a mí compartiendo su familia conmigo y además aprendieron la aplicabilidad de esta herramienta.

2.- Visión lúdica de la enseñanza: Las metodologías de aprendizaje mediante el juego tienen efectos muy positivos, puesto que este despierta la curiosidad y permite la práctica de nuevas habilidades. Aquí la pregunta es...¿Podría ser lúdica la enseñanza? Aquí en este punto es donde juegos como Quizz, educaplay, o scape rooms virtuales hacen un papel extraordinario que nos ayudará en nuestra tarea.

3.- El error como parte del aprendizaje: Tenemos que convencernos y convencer al alumnado, de que el error no penaliza, sino que forma parte del proceso de aprendizaje. Por ello, la evaluación formativa será nuestro mayor aliada. En este punto, podemos utilizar diarios de aprendizaje, rúbricas de auto y coevaluación y el portafolio educativo.

4.- Fomentar la creatividad: Esta es sin duda, una de las competencias genéricas más útiles para el desarrollo profesional y personal y desgraciadamente, y según mi experiencia como docente, una de las que más carece el alumnado. Desde mi punto de vista, el presentar tareas a modo de retos para el alumnado es lo más efectivo. Planteamiento de situación o problema y ¿Cómo lo resolvemos? o, diseñar un prototipo que será aplicado en diferentes situaciones y/o contextos. Por supuesto en este punto, no se aportan soluciones que procedan de una "copia de internet" sino que se deberán generar y serán únicas de cada alumno/a.

Estos ejemplos, son los que hemos puesto en práctica durante este tercer trimestre en educación a distancia con el alumnado, ejemplos que probablemente nos hayan ayudado a sentirnos más conectados a nuestra vida, aquella que tenemos la sensación que el covid-19 nos ha robado durante unos meses.

Os dejo algunas evidencias fantásticas de mis alumnas:

Blanca Puerto y cómo afrontar el "Coronavirus". (Cedido).


Patricia David, visión de un módulo de 1º de integración social (Cedido).


Gracias por haberme leído,

Julia Salado Álvarez